Cáncer de pulmón hoy < Los biomarcadores
Los biomarcadores o marcadores biológicos son esas sustancias presentes en las células (en las tumorales y en las no tumorales) que ofrecen información sobre el estado de salud o sobre una enfermedad, como en el caso del cáncer de pulmón.
Estos biomarcadores pueden ser genes o el perfil genético de una persona, metabolitos, proteínas o parámetros fisiológicos o anatómicos.
Cuando hay células cancerosas, estas producen un mayor número de estos marcadores biológicos, que pueden estar presentes en la sangre, la orina o la materia fecal, entre otros tejidos o fluidos. Estas sustancias aportan información clave sobre el cáncer. Además, el cáncer de cada persona tiene un conjunto único de biomarcadores, y algunos de ellos afectan a la forma en que funcionan ciertos tratamientos.
Las pruebas de biomarcadores, por tanto, pueden ayudar a determinar cuál será el mejor tratamiento de cáncer de pulmón para cada persona. Algunos de ellos, como la terapia dirigida o la inmunoterapia, puede que sean más eficaces en personas cuyo cáncer cuente con ciertos biomarcadores.
Entre los biomarcadores que se pueden contemplar en una enfermedad como el cáncer están las mutaciones de genes, que son patrones de expresión de un gen en los tumores. Lo que hacen estas mutaciones es provocar que se produzcan proteínas alteradas, que suelen favorecer el crecimiento y la diseminación del tumor.
La identificación de estos genes mutados tiene una gran importancia en la clasificación del cáncer de pulmón, el estadio en el que se encuentra, el pronóstico y la elección del tratamiento, ya que existen medicamentos específicos para determinadas mutaciones. Por ejemplo, las personas con cáncer que tienen ciertos cambios genéticos en el gen EGFR reciben tratamientos dirigidos a esa mutación.
En definitiva, la elección del mejor tratamiento para una persona con cáncer de pulmón dependerá de:
Lo mejor es que lo comentes con tu médico. Esta prueba suele ser rutinaria para seleccionar el mejor tratamiento para las personas con un diagnóstico de cáncer de pulmón no microcítico.
Los médicos también suelen solicitar pruebas de biomarcadores en casos de cáncer metastásico o avanzado.
Lo primero es obtener una muestra del tumor para poder analizar las células cancerosas en el laboratorio. Esta muestra se puede obtener por medio de una biopsia del tumor o, en caso de que se vaya a practicar una cirugía como parte del tratamiento, se aprovechará la propia operación para extraer la muestra del tumor.
Si no es posible extraer tejido mediante una biopsia al uso, otro método útil es la biopsia líquida: se trata de un análisis de sangre sencillo que puede ayudar a determinar la presencia de algunos de estos biomarcadores.
Cabe destacar que no todas las personas con cáncer poseen alteraciones detectables en sangre. Algunas mutaciones pueden no ser detectadas por los análisis, por ello es tan importante la evaluación individual de cada persona.
Entre los tipos de biomarcadores, encontramos los marcadores tumorales circulantes. Este tipo de biomarcador se encuentra en la sangre, en la orina o en la materia fecal, entre otros fluidos. Son muy útiles para evaluar la respuesta a los tratamientos, por lo que los análisis para su detección se suelen realizar periódicamente.
Los más comunes son:
Dentro de la clasificación de los biomarcadores, también encontramos los biomarcadores tumorales en tejido/sangre periférica. Se recogen a partir de células del propio tumor, presentes en muestras obtenidas de distintas maneras (cirugía, biopsia o citologías). En estos análisis se evalúa el material genético de las células cancerosas obtenidas para identificar mutaciones en los genes.
Los biomarcadores más frecuentes son los siguientes:
Estos biomarcadores suelen ser excluyentes entre sí, es decir, detectar uno de ellos puede ayudar a descartar los demás.
Existen otras mutaciones como:
Algunos de los biomarcadores representan un porcentaje muy bajo de los casos de cáncer de pulmón, pero pueden ser igualmente útiles porque son excluyentes de otras mutaciones, como se ha indicado anteriormente. Esto significa que hay mutaciones que son incompatibles entre ellas, por lo que la presencia de una puede ayudar a descartar la existencia de las demás en el resto del tejido tumoral.
Actualmente, las guías recomiendan analizar de forma rutinaria a través de la muestra de tumor obtenida las alteraciones en EGFR, ALK, ROS-1 y BRAF.
Todo lo que debes saber sobre el diagnóstico del cáncer de pulmón.
La medicina de precisión o personalizada esta cambiando el abordaje de algunos tipos de cáncer.
Next Generation Seguencing es una técnica de diagnóstico genético que permite analizar alteraciones indetectables con otras pruebas.
Infórmate aquí sobre las diferentes opciones de tratamiento del cáncer de pulmón.