Un diagnóstico preciso ayudará al médico a estimar la progresión del mieloma múltiple y determinar cuál es el tratamiento indicado. Además de llegar a un diagnóstico adecuado, es importante poder detectarlo en fases tempranas de la enfermedad.
Para entender en qué consiste el diagnóstico del mieloma múltiple, es necesario conocer que la proteína monoclonal es un tipo de anticuerpo que se encuentra en grandes cantidades en la sangre u orina de las personas con mieloma múltiple.
Un aumento del nivel de la proteína monoclonal suele indicar la progresión de la enfermedad, mientras que una disminución del nivel reflejaría una respuesta al tratamiento.
Para detectar el mieloma múltiple, es necesario que a la persona se le realicen diferentes pruebas, tal como se explica a continuación.
Estos análisis sirven para ver cómo se encuentran algunos parámetros que suelen estar alterados en el mieloma múltiple y para evaluar el daño que puede existir en algunos órganos, como los riñones.
Prueba para medir el nivel de células de la sangre (glóbulos rojos, glóbulos blancos y plaquetas). Estas mediciones indican el grado en que las células del mieloma en la médula ósea están afectando el desarrollo de las células sanguíneas normales.
Se realiza a través de análisis de sangre y de una recolección de orina durante 24 horas para conocer cómo es el funcionamiento del riñón. Prestar atención a este aspecto es importante porque el mieloma múltiple puede afectar a la función de los riñones.